Lola Crespo, Psicóloga
Psicóloga-Sexóloga con Nº de Colegiada AN 10713
Más de 20 años de experiencia en el campo de la Sexología, Trabajo con Familias y Profesorado, Deshabituación tabáquica, Asesoramiento psicológico a embarazadas, Asesoramiento psicológico a mujeres en edad menopáusica y Talleres de Salud Emocional para Niños, Adolescentes, Adultos y Mayores.
Experta universitaria en Psicología forense y Postgrado en Psicología del Testimonio y Credibilidad de las Declaraciones.
Miembro del grupo de trabajo de Psicología del Duelo y Pérdida del Colegio Oficial de Psicólogos de Andalucía Occidental.
“La relación con el terapeuta es el corazón
(Greben)
mismo de la terapia, y es el vehículo a través del
cual ocurren los cambios en la persona”
Algunas preguntas habituales
¿Si voy a un psicólogo significa que tengo un trastorno mental?
Hay muchos motivos para acudir a un profesional de la psicología y en la mayoría de las ocasiones no se acude porque se tenga un trastorno mental o se padezcan alteraciones específicas como fobias o neurosis.
Se puede acudir por varias causas:
- Muchas veces nos sentimos tristes, frustrados o deprimidos, tenemos miedo ante la situación actual, no acertamos a ponerle nombre a lo que sentimos y esto provoca una gran confusión y un gran pesar.
- Otras veces podemos sentir ansiedad, estrés, insomnio y ni siquiera sabemos qué nos está ocurriendo y el porqué de que nos ocurra.
- En alguna ocasión sentimos que las relaciones sociales son difíciles, que los otros son difíciles y no sabemos cómo comunicarnos adecuadamente. Nos va mal con las parejas, con los amigos, con los compañeros de trabajo y empezamos a pensar que igual no es siempre culpa de los demás, que quizás también nos falta autoestima y que nos dejamos influir más de lo que quisiéramos.
- Hay momentos de pérdidas o de cambios físicos o psíquicos, y no podemos gestionar solos nuestras emociones.
- Y hay veces también en las que debemos tomar decisiones, no nos aclaramos y nos gustaría que alguien nos orientara.
- Y a veces también tenemos problemas, problemas reales que afectan directamente a nuestra vida diaria, nuestros hijos tienen problemas o de trastornos del comportamiento, del aprendizaje, o, hay indicios de depresión, o incluso trastornos de alimentación, y entonces necesitamos terapia, no consejos.
¿Qué me ofrece entonces un profesional de la psicología ?
Igual que los profesionales sanitarios cuidan de la salud de nuestro cuerpo, nosotros, los profesionales de la psicología, cuidamos la salud de nuestra mente.
Nos formamos para entender los procesos mentales que subyacen a los comportamientos. Nunca nada se hace porque sí. Estos conocimientos se transmiten de modo comprensible y humano de forma que puedan ayudar a las personas a entenderlos ellas también. Colaboramos para entendernos mejor y entender qué pasa y porqué nos pasa.
Hemos aprendido a escuchar, a analizar cuáles son los motivos que nos llevan a hacer lo que hacemos, a no juzgar, a ayudar a tomar conciencia de nosotros mismos, a acompañar y aliviar el sufrimiento psíquico que puede venir por múltiples motivos de los cuales no somos conscientes. Contribuimos de alguna forma a que una persona sea más ella misma, que esté más sana mentalmente y que en definitiva sea más feliz.